Hace un par de años, cuando hacía cerveza sin el apoyo de productos de software para calcular las características de la cerveza, y más bien seguía mi intuición como si fuera un chef creando una nueva receta, diseñé una IPA belga que me pareció espectacular, ya que era muy fácil de tomar, y presentaba sabores y aromas frutales muy intensos y agradables. Fue mi primer intento de recrear una IPA con sabores belgas brindados por la levadura y me pareció todo un éxito.
